Con este maravilloso calor a quien no le apetece nada más que ensaladas, sopas frías y fruta. Venga, es el momento de comer mucho crudi.. Y además este es un plato sencillo y rápido de elaborar, con una textura cremosa, sabor muy fresco y además lleno de propiedades y color.
El aguacate no engorda!! Nooooo!!. Sí, tiene mayor contenido en ácidos grasos que el resto de frutas, en cambio, en las cantidades adecuadas su consumo es muy beneficioso. Es rico en ácido oleico, que ayuda a controlar los niveles de colesterol. También en ácido fólico, muy aconsejado para las embarazadas. Por supuesto en fibra, vitaminas E y C, que son potentes antioxidantes, vitamina D, muy importante para la fijación del calcio.
Esta fruta nos ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre. ¿Qué más queréis, queridos!
INGREDIENTES
- 2 remolachas cocidas
- 1 aguacate
- 1 cebolla tierna (ponla en agua con limón un ratito)
- 1 cucharadita de mostaza Dijon
- El jugo de una lima
- Sal marina y pimienta negra recién molida
- Semillas de cáñamo
- Salsa de nueces
ELABORACIÓN
- Corta las remolachas en cubitos pequeños.
- En un bowl mezcla la cebolla tierna muy finamente picada, la mostaza, el jugo de media lima, sal y pimienta.
- Añade la mezcla a la remolacha, mezcla y reserva.?
- Machaca el aguacate con el jugo de la otra mitad de la lima, sal y pimienta. Si lo haces es un procesador o batidora quedara con esta textura más cremosa y gustosa.
- Con ayuda de un aro de emplatar o de un cuenco, pon la remolacha bien mona en el plato.
- Adorna con unos germinados o semillas de cáñamo.
- Para la salsa de nueces necesitas: 100 gr de nueces activadas; 50 ml de vinagre de manzana; 2 cucharadas soperas de sirope de arce, coco o miel y sal y pimienta.
- Pela las nueces y pícalas; mézclalas con el resto de ingredientes y listo.
- Acompaña tu tartar con esta salsa. está para chuparte los dedos.